La Maldición de los Años Impares

Luego de un prolongado Simposio, los Compiladores decidimos hacer público este texto del Magnánimo que vendría a ser algo así como la "Perla Negra" de su obra. Quienes nos oponíamos a su publicación argumentamos que este "pronóstico fallido" podría hacer tambalear la figura del Licenciado... quienes avalaron la publicación, argumentaron que eso es lo mejor que podía pasarle al susodicho si todavía tenía alguna intención de recuperar al menos una miga de dignidad. Ergo, lo publicamos.
Observarán, quienes lean "La Maldición de los Años Impares", que trata sobre una investigación centrada en el "Día del Estudiante". Para no prolongar aún más este prólogo, sólo diremos, los que aún tenemos respeto por el Gran Iluminado (y no sabemos porqué), que su pronóstico falló, sí... pero sólo por menos de 24 hs.


Inocentes tortolitos que mañana, movidos por la explosión hormonal que implica la llegada de los colores a las calles, irán a la costanera y otros espacios verdes a festejar su día, no estén tan contentos: va a llover.
Sí, ¿y cómo lo sé? Arduas horas de laboratorio me han llevado a la conclusión de que todos los 21 de septiembre de los años impares llueve. Y eso no es todo, también creo conocer la causa. Présteme atención.
En 1993 estaba yo en la plenitud de lo que científicamente se conoce como la edad del pavo y, por ende, decidido a pasar el día del estudiante paveando con amigos, cuando de repente al levantarme después de una noche estimulante ya con la mochila en la espalda y la gorrita para atrás, atuendo identificatorio de alumno secundario, mi vieja me sentenció: “¿Dónde vas? ¿No ves cómo llueve?”. En un primer momento no reaccioné, claro, estaba dormidísimo. Pero después de la chocolatada y de echarle la culpa a todo personaje que aparecía en la tele, me di cuenta que no era la primera vez que pasaba algo así. De hecho, ya era el tercer año impar consecutivo que ocurría.
Es decir que la maldición se remonta al recordado 1989. Todos sabemos qué ocurrió el 9 de julio de dicho año. Carlo de Anillaco asumió como presidente de la Nación. Como verá, estimado lector, estoy evitando pronunciar ese apellido nefasto para el estudiantado nacional, y ya descubrirá porqué lo hago. Conocida es la fama de yeta o mufa de este ex – presidente, ex – presidiario y ex – candidato presidencial que arrugó; y si no me cree pregúntele a Daniel Scioli quÉ pasó el día que Carlos Saúl subió a su lancha. El hecho es que desde que este personaje está sentado en el sillón que alguna vez perteneció a Rivadavia, pasaron cosas extrañísimas que casi nadie pudo explicar: el 1 a 1, el encuentro con Xuxa en la quinta de Olivos y María Julia Ministra de Medio Ambiente, para citar sólo algunos hechos. Pero lo que me trae hoy acá es la maldición de los años impares y ningún otro acontecimiento inconexo.
Usando el sentido común y un poco de lógica, verifiqué que:
1 - De haber sido un año par el de la asunción de Carlo la historia hubiese sido la misma, nada más que durante los años pares.
2 - Maldiciendo a los estudiantes mataba varios pájaros de un tiro ya que no sólo perjudicó a éstos, sino también a los que incrementan sus ingresos en días festivos, como ser los vendedores de pororó, las promotoras, los tarjeteros de los boliches y los artesanos de la plazita Pueyrredón. Entonces, con un simple maleficio no sólo nos dejó sin mate y chicas alborotadas cada dos años a los promiscuos adolescentes, sino además dio comienzo al aumento indiscriminado del desempleo, la pobreza y la delincuencia en la Argentina.
Él ya no es presidente, pero todo es muy reciente como para que la maldición se esfume así nomás. Indagando un poco sobre la historia riojana, averigüé que esto no sólo pasa los años impares, sino todos los 21 de septiembre, los días del maestro y del abuelo también.
Por eso les advierto que si por alguna desgracia llegan a cruzarse con Méndez, tóquese la gónada izquierda y, tenga listas las tortas fritas porque mañana va a llover.

9 comentarios:

  1. Solo para decir: me gusta la nueva dinámica de este divertido espacio. Agradezco envien mis Felicitaciones al Licenciado y a sus compiladores por la creatividad en movimiento.
    Atentamente, K.

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  2. Licenciado, donde quiera que esté, sepa que no descubrió nada original! Por lo menos yo ya sabía que ese señor es yeta y que todo lo malo que nos llueve a los Argentinos es su culpa. A mí, me arruinó hasta el viaje de egresados!
    De todas formas, es bueno saber que hasta el Lic. se equivoca.

    Compiladores: interesante la nueva sección, aunque algo contradictoria. Si esas obras (si es que se puede otorgarles ese status) son para olvidar, ¿por qué nos las recuerdan?

    Saludos cordiales.

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  3. Srita Luciana: lo original no reside en el status yetístico del sujeto en cuestión, sino ne las causas de la lluvia en los 21 de septiembre de los años impares. Al menos nosotros, Los Compiladores, nunca dimos con una hipótesis semejante.. inclusive, no creo que nadie crea necesario pensar una hipótesis para semejante estupidez.

    Respecto a la contradicción aparente de la nueva sección, diremos que las recordamos por 2 razones: 1) así como el Lic.-, otros grandes se equivocan y; 2) para recordar que debemos olvidarlas... a ver si todavía se nos olvida.

    Que le ande bien,
    Sus colegas, Los Compiladores.-

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  4. Coincido en un ciento por ciento.
    Lamentablemente, hace rato que la primavera me importa un sorcho.

    Convengamos que también podría argumentarse que la primavera comienza en realidad el 22 de septiembre, por el equinoccio. Esas cosas no le importan a nadie, claro, pero cierro con una frase demagógica, pero tristemente cierta:
    Hasta la primavera nos robó ese hijo de puta.

    Gracias por el disfrute intelectual que provocó en mí este texto. Siga así, querido.

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  5. Srito./a K: lamentamos no poder hacerle llegar sus salutaciones al Licenciado. Por motivos de seguridad no transmitimos mensajes anónimos ya que son muchos y, sobre todo, muchas quienes se esconden en el anonimato para llegar a él y cumplir con un justo deber: lincharlo. ¿Las razones? Demasiadas, así que las sintetizamos en un "Se lo merece".
    De todos modos recibimos con alegría su mensaje y deseamos siga participando de este espacio antipopulista.
    Los Compiladores.-

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  6. Pianista del Averno5 de octubre de 2009, 20:01

    Muy bueno como siempre su texto. Saludos Licendiado.

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  7. Como siempre, amigos compiladores, muy divertido el texto. Buena cosecha del Lic.

    Ahora bien, yo siempre (por una cuestión psicológica que generé en mi infancia por ser excluído siempre de toda actividad compartida) me puse contento cuando llueve los días de la primavera. ¿Eso es ser malo? ¿Eso es ser menemista? (Perdón por repetir la misma pregunta). El 1 a 1 de Mendez, ¿no se refería a esto de primaveras pares e impares? ¿Será el nuevo empate social del peronismo de los 90?

    Pocas respuestas. Maldición.

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  8. Sres. Compiladores, mi mensaje no era anónimo, sino diría "anónimo". Soy K. Gracias por la invitación a seguir participando, así lo haré.

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